Chile has never been this close to a Rugby World Cup as the dream of going to France 2023 is near.
En el proceso clasificatorio hacia Australia 2003, con un diferente formato, Estados Unidos, Canadá, Uruguay y Los Cóndores compitieron por dos plazas, con una tercera disponible a través de la repesca. Chile derrotó a Uruguay en Santiago, pero luego perdió todos los partidos, en casa y de visita, incluyendo el cierre del proceso ante unos Teros que incluía a Pablo Lemoine.
En cada uno de los demás procesos clasificatorios, la piedra sobre la que siempre cayó Chile fue siempre la misma: Uruguay.
Veintiún años más tarde, el ex pilar está al frente del resurgimiento del rugby chileno.
“Cuando llego Pablo a fines de 2018, comenzamos a tener esperanzas," dijo el capitán chileno Martín Sigren tras derrotar a Canadá por primera vez y avanzar a jugar por el lugar de Americas 2 en Rugby World Cup 2023.
Él venía de hacer algo similar con Uruguay y fue muy directo y conciso con nosotros. Nos dijo que no iba a ser un camino de rosas".
Lemoine conoció el rugby en el Montevideo Cricket Club y se convirtió en el primer uruguayo en jugar profesionalmente - primero con Bristol, luego fue campeón de Francia con Stade Français, jugando también Montauban y Valence d’Agen. Tras su retiro después de 48 caps y 14 años como internacional, regresó a su país para introducir el alto rendimiento.
Compromiso total
Sigren agrega, en conversación con Sudamérica Rugby: “Nos aseguró que iba a ser bien dificil y duro e iba a necesitar de un compromiso total de todos, de jugadores, de staff, de la Federación. Dos años después, acá estamos. hemos dado un vuelco de 180°. Somos otra cosa."
La llegada de Lemoine a Chile llamó la atención - el viejo enemigo llegaba para ser el salvador.
“Recuerdo aquellos primeros días y como tuvimos que convencer a todos sobre lo que había que hacer para ser competitivos," explica Lemoine. Puede que haya habido alguna que otra reunión con sus ex rivales; convencer a los jugadores fue clave, el resto se fue alineando al proyecto.
"Estuve muchas veces en Chile como jugador y entrenador y sabía que tenían el potencial. Cuando llegué, el proceso clasificatorio sería a través del Americas Rugby Championship. Sabíamos que debían mejor en todo sentido."
Muy pero MUY buenos días Chile!
— ☆ CHILE RUGBY (@chilerugby) October 10, 2021
Gracias por acompañarnos tanto en sus casas como en el estadio 🏟!
Un triunfo de todos!
🇨🇱🏉 pic.twitter.com/RAnwMTYfbW
Habiendo ganado solo dos partidos en las primeras cuatro temporadas del ARC, el proyecto era enorme pero Lemoine tiene la personalidad para movilizar las cosas.
“Preparación física, un juego más agresivo, la defensa, los skills. Todo."
Con Sigren, los mellizos Saavedra, Matías Dittus, el lesionado Ignacio Silva, Alfonso Escobar (cuyo padre fue capitán de Chile en aquellos enfrentamientos con el Uruguay de Lemoine) y varios otros liderando, el sueño comenzó a tomar forma.
His first two tests in charge in November 2018, against Sudamérica XV and the Maori All Blacks, resulted in big losses; 2019 wasn’t much better.
Wheels in motion
The wheels were already in motion when COVID-19 hit the world. As soon as it was possible, with a government dispensation, players were back at their training headquarters.
“The dream of going to a RWC was our goal once they understood they needed to do the hard work,” says Lemoine.
Sigren adds: “It was such a hard road, one with more losses than wins, but that was 100% worthwhile. Even my family doubted what we were doing.” Families were invited to join the team the week before the second test against Canada, having shared the road.
“They were crucial in the support of our players,” added Lemoine.
Sigren explained that “we convinced ourselves that we had to believe. It was about the body and the mind, how to handle pressure, work in a High Performance environment.”
All of this preparation needed match practice and the Superliga Americana de Rugby was crucial. Chile Rugby had one of the six franchises, Selknam.
“It was trial and error, getting our preparation better with each game. We accelerated our HP programme, technically and tactically we had ten games to grow.”
Having narrowly lost against Uruguay the opportunity to play for Americas 1, it was a do or die against Canada. Lemoine and his experienced staff saw chinks in the Cannucks armour, understanding that defence would be crucial in Langford. They came within seconds of their first win against the men from the north.
The series was to be decided at home and Chile Rugby moved fast to organise their travel to and from in order to have players as rested as humanly possible.
Part of the learning curve was that for the return game, with their fans enjoying an historic win.
“We changed the mental chip. We learnt,” says Sigren.
“To close the series at home was superb.”
Chile is not yet in France 2023, they would need to beat USA in a series next year and if it is not to be, there is the Final Qualifying Tournament.
“We want to win next year and qualify as Americas 2,” confirms Lemoine. “We need to step it up but players know what the prize is. They can feel it closer.”