Cuando Sophie Spence compiló su carrera en el coaching en agosto, no se imaginó que Rugby World Cup estaría en su horizonte.
Su objetivo inmediato era participar del curso de coaching Nivel 3 con la Welsh Rugby Union (WRU) y seguir aprendiendo como entrenadora de los varones en el club de la National League Division 1 West, Penclawdd.
Como ex internacional por Irlanda, Spence está cada vez más convencida de que la vida está llena de cambios y posibilidades.
A fines de noviembre, recibió a Warren Abrahams y Rachel Taylor a la cafetería que abrió en Gowerton al instalarse en el sur de Gale con su mujer Anwen.
Esta semana se anunció que se unirá al grupo de entrenadores de Gales como parte del Programa de Pasantías en Coaching para Rugby World Cup 2021.
“Estoy en shock," le admitió Spence a World Rugby.
“No pensé en estar en esta posición. Es fantástico y tengo muchas ganas de sumarme y aprender lo más que pueda."
Spence viene trabajando con los forwards en Penclawdd, identificando el punto de encuentro como una particular fortaleza propia, pero quiere agrandar sus horizontes en el coaching con Gales.
“Abrahams me dijo que quiere involucrarme mucho. No estoy ahí para aprender desde las sombras; quiere que participe."
“Con Warren como head coach, y Tayls (Taylor) como entrenadora de técnicas individuales, será ver como involucrar mis fortalezas, buscando agregar valor al equipo."
Historia compartida
La reunión del mes pasado en Y Shed fue la primera vez que Spence conoció a Abrahams, aunque conoce desde hace tiempo a Taylor.
En sus cuarenta tests para Irlanda, Spence, 33, jugó ocho veces ante Gales, enfrentando en siete de esos encuentros ante Taylor.
Coincidentemente, la última vez que se enfrentaron fue la última vez que ambas mujeres representaron a sus países, en el Kingspan Stadium. Taylor jugó el partido entero mientras Spence ingresó en el segundo tiempo, en el triunfo de Gales 27-17 por el séptimo puesto de Rugby World Cup 2017.
Por esta derrota, Irlanda no clasificó directamente a RWC 2021. Tres años más tarde, Spence acompañará a su ex rival con la pasantía.
“Es gracioso; lo hablaba con mi mujer el otro día y me decía que era el destino," cuenta Spence.
“Si Gales no nos hubiera vencido en el último Mundial, habría aparecido esta oportunidad?"
“Al mudarme a Gales, me llevó un tiempo volver al coaching; tuve la suerte de desafiarme con los varones de Penclawdd de cara al Nivel 3 este año. Las cosas llevan tiempo, imponer tu nombre y abrir nuevas puertas. Me siento afortunada de tener esta oportunidad y haber sido elegida para participar."
“Estoy feliz de participar y devolverle al rugby femenino que tanta alegría y pasión me dio."
‘Un deporte mágico’
Al finalizar sus carreras internacionales, Spence y Taylor pudieron jugar juntas con las Women’s Barbarians derrotando a British Army XV 37-0 en marzo 2018.
Ambas compartieron habitación y pudieron conocerse y hablar de coaching y de café. Spence aprovechó para consultarla sobre su mudanza a Gales.
"Creo que tenemos una visión similar," dijo Spence sobre como ven el coaching.
“Hemos estado en el ámbito internacional, y queremos transferir el conocimiento que hemos conseguido de otra gente, y mejorar el rugby aún más."
Para Spence ha sido un largo y sinuoso camino para Spence desde Teesside University, cuando tomó el balón por primera vez a los 21 años sin haber visto siquiera un partido. Enseguida supo que tenía talento y el deseo de aprender y mejorar a través de Darlington y DMP Sharks a Old Belvedere, Leinster e Irlanda.
“Me encanta aprender y soy una especie de esponja. Quiero saber lo más que pueda y aprender," dijo.
“Es un deporte mágico para mí. La lástima es no haber comenzado a jugarlo antes.”
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